No sabemos si lo habéis discutido ya, pero queremos aportar una propuesta de cara a la posición que colectivamente puede ofrecerse con motivo de las elecciones generales del 20N. Se trata de la iniciativa de Voto Nulo Útil.
Es indudable que en esas elecciones el movimiento del 15M como tal no se juega nada, pase lo que pase el trabajo de movilización que estamos haciendo desde hace meses deberá continuar después y no sería ningún drama que no hubiera una voz única del movimiento ante la decisión que los ciudadanos se van a encontrar a la hora de ir (o no ir) a votar. De hecho estoy seguro que la mayoría estará notando cómo las elecciones están tensionando el movimiento por la competencia que las distintas propuestas al respecto mantienen para tratar de conquistar la mayor parte de las voluntades.
Por otra parte, sin ser una cuestión crucial, sí que es cierto que las elecciones pueden ser una oportunidad más para reclamar el protagonismo para las aspiraciones de cambio o revolución social que representamos. Y de eso trata nuestra propuesta.
La iniciativa de Voto Nulo Útil (al menos al Senado) está pensada para que pueda ser compartida sin conflictos por la inmensa mayoría del movimiento y, sobre todo, por una parte muy importante de la Sociedad que está ya harta de un sistema político que se muestra desde hace tiempo corrupto y decadente.
Se trata de introducir un modelo concreto de papeleta reclamando un nuevo proceso constitucional y la prioridad del gasto social y la defensa de los derechos sociales y laborales por delante del pago de la deuda soberana (justo lo contrario de lo que se impuso hace poco). Esa papeleta, que sería considerada voto nulo, llamamos a que se utilice al menos a la urna del Senado.
Esta iniciativa óbviamente es compatible con el voto a cualquier candidatura al Congreso diferente a PP y PSOE, como defienden los de “Nolesvotes” o los que se presentan como “ciudadanos en blanco”. Incluso es compatible con los que promueven la abstención, porque su efecto en los resultados es idéntico (eso es, ninguno) y además es posible abstenerse al Congreso mientras se vota nulo al Senado. Al votar nulo en la urna del Senado, además, no se frustran las expectativas electorales de nadie, ya que el sistema de esa elección en concreto hace a la práctica imposible ahora mismo que entre ningún senador diferente de los que proponen los partidos mayoritarios en cada circunscripción. Y además estamos señalando muy especialmente el Senado como lo que es, el símbolo de lo peor del sistema político.
También es compatible con la idea de organizar una consulta popular paralela, ¿qué impide hacer las dos cosas?, aunque aventaja a esa propuesta en un par de aspectos: uno que no tiene prácticamente ninguna necesidad logística, pues mientras es difícil montar en un solo día mesas y urnas paralelas en un montón de sitios, estará al alcance de cualquiera que conozca la idea el imprimirse o incluso escribirse a mano la papeleta y depositarla en la urna “oficial”; el otro aspecto es que un número realmente grande de votos nulos estará oficialmente contabilizado y además la Administración se verá obligada a guardarlos y podrá reclamarse su examen por cuestiones legales, mientras que los votos en urnas extraoficiales podrán ser más fácilmente ignorados al cuestionarse la fiabilidad de su recuento.
Podéis saber más sobre la iniciativa de Voto Nulo Útil en nuestra web: http://votonulo20n.wordpress.com/, donde también podréis examinar el modelo de papeleta.
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